Yeannys Mundarain y Johana Newman
Juan Mattey es un joven estudiante de Comunicación Social a quien la vida le ha dado la oportunidad de dispararle a las personas y no necesariamente con un arma de fuego, sino con una cámara fotográfica. Este fotógrafo, amante de la música y del arte audiovisual, busca cambiar la visión de la mujer actual por la de una más segura de sí misma.
Al seguir su trabajo desde sus inicios nos muestra la gran evolución de sus proyectos, tanto del mundo deportivo como el arte de los desnudo, su esencia se encuentra plasmada en cada una de sus fotografías que, sin duda, a otros les puede costar años e incluso décadas.
Jovial, bromista, conversador y muy detallista son algunos de los adjetivos que caracterizan a este genio del flash. Su comienzo en la fotografía fue el “boom” que está de moda en un tiempo determinado.
“Había un boom y tú sabes que siempre hay una moda entre los adolescentes, pero a mí me llegó el de la fotografía. No era una cosa a la que yo decía que estoy destinado para ser fotógrafo, no… Pero desde muy joven me llamó la atención el uso de las cámaras”, agregó.
El 2012 fue un año de cambios para Juan. Luego de su primer curso de fotografía, La Llovizna fue el paisaje ideal para practicar lo aprendido. A pesar de que no tenía una buena cámara, logró capturar sus primeras fotos y estas lo impulsaron a decidir que este sería su oficio.
“Yo no tenía cámara, pero luego del curso de iniciación que hice con un pana, pasaron como dos meses para que mi papá me regalara mi primera cámara, una Nicon que no tenía ni batería ni cargador”, precisó entre risas.
– Estuvo en el mundial del 2014, ¿cómo fue su experiencia como fotógrafo?
Fue genial, había mucho que fotografiar y lo aproveché como pude. La verdad mi experiencia en Brasil fue un peligro emocionante, conocí a un colombiano, también fotógrafo, que me facilitó una credencial trampeada para el entrenamiento de Colombia y Holanda, yo estaba asustado porque me podían meter preso o demandarme, pero me metí en el entrenamiento de Colombia y fue la mejor experiencia que pude tener.
Nuevos retos
Todo fotógrafo, en algún momento de su vida, ha sufrido una crisis. Ese instante donde no tiene un trabajo puntual y decide emprender en un mundo desconocido. Para Juan fotografiar en eventos no es algo que le llame la atención pero no lo sataniza.
“La fotografía de la BBC (bodas, bautizos y primera comunión) realmente sirve, en mi caso, para matar tigritos porque en sí, es la fotografía que más ingresos te da, pero a mí lo que me llena es la fotografía deportiva”, dijo.
Incursionarse en nuevos retos es algo que a Juan no le teme, prefiere no planificarlo sino ejecutarlo, se basa en el hacer y no en decir. “La verdad soy una persona que los proyectos nunca me han gustado pensarlos, ni imaginarlos, hago las cosas y es a lo que me salga”, expresó.
Para Juan, la mujer refleja belleza y elegancia. Insitu es la visión real de la mujer, tal como es, con sus defectos y virtudes, la naturaleza pura y dura. Este proyecto revelador muestra la personalidad de una mujer a través de un cuerpo con poca ropa e incluso la desnudez es protagonista en este tipo de fotografías.
Seguridad de sí misma, autoestima y valentía son los requisitos fundamentales para ser una modelo Insitu. Si deseas ver más de este proyecto visita su página de Tumblr o su Instagram.